Zoff se encontraba con su esposa descargando las maletas de su vehículo, dentro del garaje, cuando se vieron sorprendidos por la espalda por cuatro personas que llevaban el rostro cubierto.
Los atracadores interceptaron a Zoff, le tiraron al suelo y le dieron una patada en el rostro que le ha producido una herida en un ojo.
Después, obligaron a la pareja a entregarles todo objeto de valor que llevaban encima: unos mil euros en metálico, dos teléfonos móviles y dos relojes.
Tras eso, los desconocidos, que según ha relatado Zoff a la policía tenían acento de la Europa del este, huyeron con su botín.
Zoff acudió a presentar en una comisaría cercana a su domicilio, que se encuentra no muy distante del estadio Olímpico de Roma.